Testimonio: "Hasta Nunca, TOC"

Soy una chica de 21 años y he padecido TOC (Trastorno Obsesivo Compulsivo) durante dos años, desde los 19 años. Este trastorno es muy duro y prácticamente imposible llevar a cabo una vida normal. Espero que mi experiencia pueda servir de ayuda a otras personas y darles la certeza de que SE PUEDE SUPERAR.
Al principio comencé a sentir mareos, temblores, ataques de pánico, ansiedad, sensación de vacío e irrealidad, me sentía como fuera de mí misma. Quien haya sufrido algo parecido sabrá de lo que hablo. ¡Es un infierno! Mis obsesiones acerca de la enfermedad, la muerte y el peligro que veía en todas partes llegaron a ocupar todas las horas del día. Trataba de evitar esos pensamientos y cuanto más luchaba contra ellos más fuerza tenían y más reales se volvían. Yo encima me sentía culpable de tenerlos.
Acudí a la consulta de una psicóloga y no obtuve ninguna mejoría. Cada vez estaba peor y pensaba seriamente que me estaba volviendo loca. Todos mis intentos por ser la persona que era antes no servían para nada, pero yo no me rendía.
Así fue como fui a la consulta de Helena Fernández Brioso, gran profesional a la que le debo haber vuelto a recuperar mi vida, mi alegría y mi ilusión.
Lo primero que hizo es buscar el origen de lo que me sucedía: mi trastorno comenzó con la visita al hospital donde se estaba muriendo mi prima, que era de mi misma edad. Pero esto fue el conflicto desencadenante, el conflicto programante comenzó mucho antes, en el útero materno, donde perdí a mi gemela en el cuarto mes de gestación.
Fue un gran alivio para mí saber y comprender lo que realmente me pasaba.
El camino no fue fácil, pues tuve que enfrentarme a mis mayores miedos. Por eso os aconsejo que busquéis a un buen profesional que os pueda de verdad ayudar, es muy importante la confianza entre tú y el terapeuta, es la base para poder salir de esto. Saber que no te va a juzgar y te va a acompañar en todo el proceso.
No os dejéis convencer por las personas que dicen que el TOC no tiene solución ¡NO ES VERDAD! Se puede superar y yo soy la prueba. Buscad un buen profesional y acudir cuanto antes, no perdáis el tiempo.
Doy las gracias a mi compañero de viaje, el TOC, del que tanto he podido aprender y que me ha llevado a profundizar en mí misma, ya no le necesito. Ahora soy yo la que lleva las riendas de mi vida… HASTA NUNCA, TOC.
Tú, Helena, has sido la LUZ que me ha acompañado en mi camino. Gracias por tu dedicación, tu profesionalidad y por confiar en mí desde el principio. Eternamente agradecida.
Un abrazo a tod@s.
Pilar Martín Peña. (Córdoba)